se le olvida siempre.
nunca estuvo realmente ahí. nunca. siempre estuvo con un pie en la mesa y el otro en el margen de tus hojas, los mejores días agarrado de una grapa.

se siente tan pesado. una piedra estúpida, feliz porque a ella ataban las cometas.
qué se creía.
qué coño se creía.

en el fondo siempre ha jugado al gato y al ratón consigo mismo, sabiendo que acabaría por alcanzarse. y devorarse. durante un rato, parecía que no estaba solo entre las piedras del parque.

so fucking demanding. that's me.

retrasando lo inevitable,
arrebatado
es agua derramada
secándose en el suelo



y no me hago ilusiones, la espiral está hecha pedazos